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La cabina de ducha empotrada es una de las soluciones que mejora notablemente la funcionalidad, el confort de uso y la ambientación del baño. Son ideales tanto para espacios grandes como para los pequeños, donde cada centímetro cuadrado debe estar bien pensado y adaptado.
A diferencia de las cabinas de ducha prefabricadas con medidas fijas, estas se pueden adaptar perfectamente a sus necesidades. En nuestra oferta hay vidrios de distintos anchos —es decir, puertas de ducha de 80, 90, 100, 110, 120, 130, 140 y 150 centímetros— para que sirvan tanto en cabinas pequeñas como en grandes, capaces de alojar a dos personas.
Las puertas de ducha se instalan bien directamente sobre el pavimento con desagüe lineal, bien sobre un plato de ducha, sin que importe su altura. Este tipo de productos son totalmente estancos y protegen eficazmente el suelo y todos los elementos del baño de las salpicaduras.
Las mamparas de ducha de la marca Rea pueden presentar distintos mecanismos de apertura de sus hojas. Hay tres opciones: puertas de ducha abatibles, puertas de ducha correderas y puertas de ducha plegables, que se pueden montar tanto a la derecha como a la izquierda.
La primera solución, contrariamente a lo que podría pensarse, no es tan habitual. En algunos modelos solo se mueve una hoja; otros se abren como una puerta de armario, tanto hacia el interior como hacia el exterior.
En cambio, las puertas de ducha correderas pueden componerse de dos o más hojas. El mecanismo de apertura y cierre es suave y fiable. Esta solución permite aprovechar al máximo el espacio sin limitarlo de ningún modo.
También están disponibles las puertas de ducha plegables, que igualmente varían en el número de hojas. Tienen una construcción más sencilla, sin recovecos, y han sido diseñadas para que sus elementos se deslicen con suavidad.
Las mamparas de ducha cumplen no solo una función práctica, sino también estética. Pueden ser minimalistas y discretas o, por el contrario, llamativas, con perfiles más gruesos y acabados en color dorado, plateado e incluso negro. Lo mismo ocurre con la manija: algunos modelos cuentan con un tirador largo y estiloso, otros con uno corto o integrado en la carcasa. Así, las puertas de ducha se integran a la perfección en la decoración del baño y el vidrio transparente no ocultará el interior de la cabina ni los azulejos colocados en ella.
El vidrio de la ducha está fabricado con vidrio templado de alta calidad de 6 mm de espesor. Este material destaca por su durabilidad y resistencia. No hay motivo de preocupación por arañazos, daños mecánicos ni por el uso intensivo.
Además, las puertas de la cabina de ducha están recubiertas mediante láser con el tratamiento Easy Clean —según el modelo, en una sola cara o en ambas—. Esto hace que no se adhieran los depósitos de cal, jabón, champú ni otros cosméticos, y que su mantenimiento en perfecto estado sea muy sencillo. También resulta más fácil eliminar las posibles marcas de agua o suciedad tras la ducha. Basta con un paño húmedo y un limpiacristales. No es necesario comprar detergentes especiales ni otros accesorios.